El recubrimiento en polvo es un método avanzado para aplicar un acabado protector decorativo en una amplia gama de materiales y productos usados tanto por la industria como por los consumidores.

El polvo utilizado en este proceso es una fina mezcla de partículas de pigmento y resina, que son rociadas sobre una superficie eléctricamente cargada.  Las partículas de polvo cargadas se adhieren a la superficie eléctricamente cargada y conectada a tierra hasta que se calientan y se fusionan en una capa uniforme dentro de un horno de curado.

El resultado es un acabado atractivo, uniforme y altamente duradero. El recubrimiento en polvo es la técnica de pintura industrial que más ha crecido a nivel mundial.

En Replastisa ofrecemos este acabado en la mayoría de superficies metálicas

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad